«Yo lo odiaba. Lo odiaba en un sentido bíblico, apasionado y total. Odiaba que repitiera esa historia cada vez que iba a cenar a su casa, todos los viernes por la noche. No importaba a quién llevara conmigo. No importaba con qué tarado estuviera saliendo en ese momento.
Él siempre contaba la misma historia. Verás esa historia era su último trofeo. Para un hombre como Charles -triunfador, rico, encantador-, una mujer guapa, lista y brillante como Marnie».
#AsíEmpieza «Siete mentiras», de Elizabeth Kay, la historia de Marnie y Jane, dos amigas que se cuentan todo menos la verdad