Siete relatos contiene este libro, algunos publicados en otras antologías y que el autor ha agrupado por afinidad de espacio y de clima. Ambientados en distintos lugares francófonos de Bélgica y Francia: Lieja, las Ardenas, Beauvois, París, …el campo y la ciudad en otoño, escenas de caza, íntimamente mezcladas con encuentros amorosos, conflictos familiares, abandonos, soledades y otras historias. La naturaleza, en la forma de bosques, de animales, de lluvia o nieve, estará muy presente y muy ligada a la tensión emocional de todos los personajes.
Vásquez es un escritor cuyas narraciones suelen presentar personajes solitarios, parejas separadas o en vías de separación. La soledad es un leit motiv en la obra de Vásquez. Y en estos relatos aún se nota más. La lectura de estos textos me ha hecho evocar imágenes de las películas de Krzysztof Kieslowski. Hay historias de amor desoladoras, hay soledad y desapego en todos los personajes, pero también hay un deseo de compañía, de sentirse querido y protegido. Así, la vida pasa y la vemos pasar en estas narraciones.
Es El Regreso, un relato que refleja el apasionado apego de Madame Michaux por su tierra, bosques y ganado, Les Houx, la gran casa familiar en la provincia de Lieja. Una casa que conocerá palmo a palmo incluso la recorrerá mentalmente mientras está lejos, en una prisión donde fue encerrada por asesinato. La imagen y el recuerdo de esa casa y sus terrenos la mantendrán con fuerzas para seguir viva. Pero a su retorno las cosas han cambiado.
La siguiente narración, Los amantes de Todos los Santos, que da título al libro, se ambienta en la zona de las Ardenas: Modave-Ayvaille-Ferrieres… Es la noche de difuntos. Una pareja con fuerte tensión emocional sale de caza, sin éxito, aplazando siempre una importante decisión que han de tomar ambos. Incapaz de afrontar el problema con su pareja, el hombre inicia una escapada nocturna que le hará encontrarse con una solitaria mujer que, a su vez, vive con el recuerdo de su marido perdido.
El inquilino vuelve al tema de la caza, en la misma zona de las Ardenas que el relato anterior. Georges y Xavier en el pasado han compartido a Charlotte. Pero ahora ya son los tres viejos. El hijo de Xavier, Jean, organiza una partida de caza. Es otoño. Los dos viejos amigos participan con un grupo numeroso. Charlotte y Catherine, las esposas, esperan en casa mientras los hombres y los perros salen. Pero la caza se interrumpirá por un suceso imprevisto. La nostalgia, los recuerdos ligados a un cuaderno de mapas imaginarios dejan un regusto amargo en la historia.
Ambientada en París, El en el café de la République, una pareja separada no hace mucho vuelve a reunirse para visitar al padre/suegro. Contada en primera persona por el personaje masculino, pendiente de unas pruebas médicas que pueden cambiar radicalmente su vida, traslada al lector la inseguridad, la soledad y el desconcierto de tres personajes que se enfrentan a sus vidas de modos muy distintos.
La soledad del mago vuelve a enmarcar el relato en una partida de caza, aunque el tema principal sea la atracción sexual entre una mujer casada y embarazada –Selma- y Chopin, un hombre al que apenas conoce, del que no hay noticias de su pasado, aunque las cartas y los trucos se le dan bien. Las partidas de caza y los trucos de magia con cartas y se alternarán con los encuentros amorosos. Cuando el marido, Léopold, se da cuenta de la infidelidad de ambos, ocurrirá un suceso que cambiará su modo de enfocar la relación.
Lugares para esconderse oscila entre Bruselas y París. También está contada en primera persona, y trata un encuentro con una pareja amiga del narrador, en unas circunstancias tristes y penosas. La visita a la casa campestre del padre de Claire, Monsieur Gibert, que le lleva de pesca. Con él se entera de detalles que han pasado desapercibidos, sobre Claire y su marido, Philippe.
La vida en la isla de Grimsey gira alrededor de caballos, un picadero, una veterinaria, y el hijo de un potentado, Oliveira, que no quiere seguir sus pasos y reniega de su herencia, aunque busca sus orígenes. Pero también gira alrededor de una mujer que está entrando en la madurez y está sola, con los recuerdos de una hija perdida. Casi se centra más en el drama de la mujer, ya que el hombre es poco menos que un espectador, que no se implica apenas en la incipiente relación y que la ve de lejos.
En suma, una colección de relatos otoñales, de día de difuntos (en casi todos hay alguien que muere) y por los que desfilan soledades, añoranzas y diversos intentos de amar o de ser amado. Escritos con la maestría que cada vez es más fuerte en este escritor colombiano.