Seguimos hoy con la misma autora de ayer Muriel Spark, ahora con otros de sus libros publicados este año, en este caso por Impedimenta, Las señoritas de escasos medios. Las características sobre la autora que señalábamos ayer para El asiento del conductor ya estaban plenamente vigentes en esta obra anterior. Personajes que descolocan por sus actos al lector, comedia en la tragedia, tragedia anticipada conociendo desde el principio el fin de algún personaje, y una sensación de que siguen faltando piezas del puzzle y que para completarlo hay que llegar hasta el final. LEER MÁS
La trama se desarrolla en una residencia para chicas con pocos medios londinense tras el fin de la guerra en 1945: el club May of Teck. Allí se reúnen un variado grupo de mujeres de antecedentes diferentes que revisitan su actualidad desde el punto de vista de su historia propia. El futuro escritor Nicholas Farringdon, que es un habitual del club, se siente maravillado por la visión propia de los acontecimientos que tienen esas señoritas. Junto a Nicholas iremos conociéndolas una tras otra a todas sabiendo por anticipado que el futuro deparará la muerte al escritor, siendo una de las señoritas de aquel tiempo, Jane Wright, quien recoja el testigo de narrar sus vicisitudes conjuntas.
Los continuos saltos temporales incrementan la intriga, el deseo de saber qué aconteció allí que ahora guarda relación con la muerte del personaje.
Título: Las señoritas de escasos medios | Autor: Muriel Spark | Editorial: Impedimenta | Traducción de Gabriela Bustelo | Páginas 178 | Precio 18,40€ |
Los continuos saltos temporales incrementan la intriga, el deseo de saber qué aconteció allí que ahora guarda relación con la muerte del personaje.
Muriel Spark demuestra un gran oficio impidiendo que el lector suelte el ejemplar hasta devorarlo por completo, lo cual por su tamaño fácilmente se hace de una sentada. Es capaz, también de convertir las penas de aquel tiempo, que ella misma vivió, en sonrisas y dulces recuerdos, siendo en conjunto una obra optimista pese a que aparentemente todo sale mal.
Divertida, viva e inteligente sigue siendo una de las mejores obras de la Spark.
Pepe Rodríguez