Desprovista
de la polémica que durante décadas comprimió a esta obra de Ortese en Italia, ahora podemos disfrutar en español de un bellísimo trocito de realidad, de un mural fotografiado con exquisito detalle de lo que fue Nápoles a mediados del siglo pasado. (más)
-No tenemos que juzgar a la autora nada más que por sus palabras, ya que ni en el tiempo ni en el espacio mantenemos cercanía con Napoles. Poder ser tan imparciales en la lejanía nos permite tener la perspectiva completa del fresco que dibuja Ortese y de la calidad literaria que atesora.
Las cinco historias que relata están impregnadas de una calidad humana infinita, quizás no tanto en El silencio de la Razón. Humanismo que percibimos en los pueriles sentimientos de Eugenia ante la cercanía de aquel objeto de deseo que son sus gafas, sin las cuales está medio ciega, pero que la autora disfraza de ventaja, mejor no ver la fealdad, la miseria e indigencia de Nápoles, del basso donde vive su familia, del servilismo y crueldad de los adultos, y más aún del precio a pagar por llevarlas. Todos los que hayan sido niños pobres de ciudad sentirán el regusto propio en su memoria.
También rezuma humanidad la historia de Anastasia, quien estando ya en la edad madura, todavía vive con su familia. Fea, aunque de buena posición sigue soñando con aquel que su corazón desea, Antonio. Se pierde en fantasías futuras, inasibles, románticas y engalanadas, a la vez que anhela una vida de pareja que las burlas de sus parientes ven imposible.
Escenas de teatro o de cine, que se abren y desenvuelven al ritmo de los personajes que entran y salen de las estancias. Lo único estable es el deseo que tienen y, cómo no, el muro que supone la ciudad en sus vidas. Así se plasma en Oro en Forcella donde el mundo de las apariencias que una gran ciudad es capaz de disimular refleja su brillo desgastado.
La ciudad involuntaria cambia el registro, la compasión y la simpatía por los desfavorecidos es la misma, pero ya no hay futuro solo una tenebrosa realidad que rodea a todos los viven en el edificio descrito. El tiempo detenido, las desgracias aumentadas y los personajes que sólo sufren, sufren sin esperanza. Nápoles en carne viva y en directo.
El Silencio de la razón, es un relato que fluye a la velocidad del tranvía, del paseo andando, acompasado con la historia de sus personajes. Excelentes descripciones de la ciudad, sus barrios, edificios, locales y personas. Escritores perdidos en sus propias guerras, aferrados a una ciudad no les une como creen, sino solo les divide, les ahoga y que como la autora Ortese, sienten que les corta con un papel en los dedos, hiriendo, sangrando, dejando muestra con este libro de sus sentimientos, que haremos nuestros. Viviremos, soñaremos y moriremos en Napoles. Ese es el gran logro de este libro, cambiar de tiempo y de espacio, para convertirnos en napolitanos expectantes de 1953.
Minúscula hace posible este gran placer con el habitual y cómodo formato de sus libros.
Título: El Mar no baña Nápoles | Autor: Anna Maria Ortese | Editorial: Minúscula | Páginas 223 | Precio 16€
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