El sentido de Metallica, de William Irwin

Hablar de Metallica es hacerlo de uno de los grupos más grandes de la Historia del rock. Ya seas aficionado a este género o no, indiscutiblemente has oído hablar de ellos.

Su sonido y sus letras contundentes son sus señas de identidad y lo que los hace inconfundibles. Los reyes de thrash metal han levantado también sus ampollas, siendo los más críticos sus propios fans cuando decidieron cambiar de estilo en discos como Load y Reload, con los que estos seguidores se sintieron traicionados, pero es lo que pasa con los grandes, que se pueden permitir hacer lo que les dé la gana sin dejar de ser los mejores. Pero hay que reconocer que incluso en los trabajos considerados inferiores, siguen teniendo letras que superan con diferencia a discografías completas de otros.

Muchos aprendimos más inglés traduciendo sus canciones que en el colegio o el instituto. Por ello me las daba de listo creyendo que entendía a Hetfield cuando coreaba sus canciones junto a él, pero qué equivocado estaba.

Quien me ha sacado de mi error ha sido William Irwin, profesor de filosofía del King´s College de Pensilvania. Aparte de académico y crítico literario, ha escrito novela y ensayo. Conocido por sus libros donde combina cultura popular y filosofía, y en los que ha diseccionado la serie Seindfeld, los Simpsons, Matrix… Tampoco es la primera vez que analiza las letras de Metallica a través de la filosofía, al igual que a Black Sabbath y tantos otros.

Digo que me ha sacado de mi error porque no basta con saber qué dicen esas palabras en nuestro idioma para comprender las canciones. En El sentido de Metallica Irwin va más allá, muestra el contexto de las letras. Tras un exhaustivo análisis, va desgranando cada frase hallando el origen de esta y el porqué james Hetfield, cantante y compositor, la ha puesto ahí precisamente y qué quiere trasmitir con ello.

Dividido en distintos capítulos, clasifica las canciones por la temática que trata, como pueden ser: Religión, adicción, locura y confusión, muerte, guerra, justicia, libertad, aislamiento emocional, control y por último resiliencia. Estos son los temas de las canciones que ha puesto bajo microscopio el autor. Por ello no siguen un orden cronológico, puesto que podemos encontrar letras que traten sobre la libertad desde el …And justice for all hasta el Hardwire …to Self-Destruct.

Hetfield no da puntada sin hilo a la hora de componer, y William Irwin se encarga de señalarnos como la infancia del compositor se refleja en muchas de sus letras; de como fue criado en un hogar en el que sus padres eran fanáticos religiosos, y de como lo marcó la muerte de su madre cuando él tenía dieciséis años. También se reflejan en esas letras las distintas etapas que ha vivido como adicto no reconocido, cuando luchaba contra esa misma adicción, y ya superada esta. Pero no son sus canciones tan explicitas, esconden mucho en frases que el autor del libro se encarga de aclararlas, aclarando incluso el origen de estas, porque todo se nutre de literatura, historia y mitos.

Un ejemplo claro puede ser el siguiente extracto: “«Fade to Black» («fundido a negro») capta perfectamente el extravío de la propia conciencia y la pérdida de la esperanza que experimenta toda persona que se asoma al suicidio. Hetfield es tan convincente en su retrato que los fans lo han confundido fácilmente con el narrador de la canción. De hecho, lo que lo llevó a escribirla fue un ataque de desesperación pasajera provocada por el robo de algunos equipos. El propio Hetfield no tenía tendencias suicidas”.

Nos demuestra como unas canciones pueden estar unidas a otras, y que gracias a la primera, surgió una segunda, e incluso una tercera como es en el caso de «The Urforgiven», «The Unforgiven II» y «The Unforgiven III», siendo quizás este el caso más claro, pero que también ocurre en otras como la mencionada «Fade to Black» y «Confusion».

Estaría todo el día enumerando ejemplos que me fascinan, pero es mejor que os leáis el libro. Encierra tanto en sus apenas doscientas páginas que redescubriréis las canciones que creíais conocer. haciendo que admiréis, aún más, a este épico grupo.