Puede que el nombre de Dolores Hitchens no te suene tanto como, por ejemplo, Agatha Christie. Y eso que fue tan prolífica, o más — escribió casi cuarenta novelas divididas en distintas series, y publicadas bajo varios seudónimos—, que la segunda. Su obra no tiene nada que envidiar a la de la famosa dama inglesa.
Aunque no lo creas, y no hayas leído nada de ella, seguro que si te gusta el cine, te has topado más de una vez con su legado. Una de las obras cumbres de la denominada nouvelle vague, dentro del cine francés, es la película dirigida en 1964 por Jean-Luc Godar, Bande à part. Esta película es la adaptación de la novela Fool´s gold, escrita por Hitchens. Y fue por esa adaptación, por la que Quentin Tarantino bautizó con el título homónimo de la cinta a su productora.
Otra razón, tal vez, por la que no nos suena Hitchens es por que La gata lo vio todo es la primera novela de la autora traducida a nuestro idioma. Ha tardado bastante en llegar a nuestro mercado, puesto que fue escrita en 1939, siendo la primera de la serie protagonizada por la encantadora septuagenaria señorita Rachel Murdock. Esta serie fue publicada bajo el seudónimo de D. B. Olsen. Ignoro el motivo por el que publicó bajo tanto seudónimo, pero me alegro de que el libro haya llegado a nosotros firmada con su verdadero nombre. Gracias también a RBA por hacernos llegar esta novela, y espero que siga publicando las sucesoras.
La señorita Rachel Murdock vive su aplacible vida junto a su hermana, la señorita Jennifer. Cierto día recibe una llamada de su sobrina Lily, a la que encuentra muy alterada. Lily le pide que pase unos días junto a ella. Debido al tono de la llamada, la señorita Rachel se pone inmediatamente en camino.
Sin separarse de su gata Samantha, la señorita Rachel descubrirá que lo que preocupa a su sobrina es peor de lo que podía haber imaginado en un principio, por lo que intentará ayudarla en lo posible. Unos días después de instalarse en el desastroso, y minúsculo, apartamento de su pariente, despierta aturdida. Ha sido drogada. Durante su desvanecimiento, su sobrina ha sido brutalmente asesinada, siendo la gata la única testigo presencial de los hechos.
Esta novela se trata de un cozy crime —pronto tendré que hacer un curso para intentar aprenderme el amplio catálogo de etiquetas dentro de distintos subgéneros—. Este término se puede usar en su sentido más concreto, puesto que el nacimiento del mismo fue a través de la obra de la mencionada Agatha Christie, concretamente por sus novelas protagonizadas por la entrañable Miss Marple, encontrándonos aquí con su homónima y contemporánea señorita Rachel Murdock. Anciana de aspecto frágil, de poca estatura y peso, pero dotada de gran inteligencia. Será de gran ayuda al no menos carismático detective Mayhew.
El resto de inquilinos, y sospechosos, tampoco se quedan atrás. Personajes bien construidos, que se mueven perfectamente entre los matices que los caracterizan. Sospecharemos de todos y todas, sin saber hasta el sorprendente giro final, quien cometió tan deplorables hechos, los cuales la gata fue la única que los presenció.
Una delicia de novela que se disfruta de principio a fin. Se agradece ese regreso a las fuentes originales de la novela negra, ese género tan de moda pero del que beben obras y autores actuales. Aunque no nos suene su nombre, después de leer esta novela, Hitchens se convertirá en una de vuestras favoritas.
Una vez finalizada tan entretenida y emocionante novela, el misterio que se nos presenta es porqué se ha tardado tanto en publicar su obra en nuestro país.