«Las lombrices son un tema que no interesa a nadie: te sorprendería saber cuánto aburren a la mayoría de los lectores los libros sobre gusanos. Hay otros temas mucho más interesantes, por ejemplo: dinosaurios, tigres, delfines, caballos blancos alados y todo eso.»
Así comienza La desafortunada vida de las lombrices, un breve tratado de
historia natural que, página a página, introduce a pequeños y mayores
en el fascinante, ¡y en absoluto aburrido!, mundo de las lombrices, unos
seres en apariencia insignificantes, ignorados por la ciencia, la cultura, e
incluso por la sociedad.
Noemi Vola ha creado un álbum sin precedentes, salpicado de ingenio
y poesía, que pone el foco de atención en un personaje extraordinario.
Sin perder el rigor narrativo ni el humor, nos descubre los secretos y
curiosidades alrededor de estos gusanos: desde la alimentación y el
hábitat hasta sus extraños comportamientos o las diferentes tonalidades
de rosa que pueden llegar a tener. Hay mucho por aprender sobre estos
animales indispensables en el orden natural, pero, hasta ahora, nadie
—con la ilustre excepción de Charles Darwin— parecía haberse interesado
en ellos.
Quizá al lector le sorprenda saber que la lombriz de tierra tiene una forma
cambiante, que la confunden a menudo con una oruga, que le apasiona hacer galerías subterráneas, que come basura y que está indefensa frente a sus muchos depredadores. Pero, incluso así, este invertebrado ha logrado sobrevivir donde otros animales mucho más célebres, como los dinosaurios, han fallado.
Sin embargo, el dato más asombroso acerca de las lombrices (y de ahí que
sean «desafortunadas») es que, en cualquier momento, pueden dividirse
en dos, y entonces su vida se convierte en una continua búsqueda de su
verdadera identidad, un proceso lleno de infortunios que provocará la
simpatía, la complicidad y la risa a lectores de todas las edades.
A lo largo de más de 250 páginas ilustradas a rotulador, la autora italiana
hace una relectura en clave irónica y fantástica de la vida de este ser tan
vulnerable, convirtiéndolo en un verdadero héroe. «La naturaleza permea
constantemente en nuestra vida cotidiana y nos obliga a plantearnos preguntas, que casi nunca son fáciles, sobre todo si siempre las abordamos desde un punto de vista antropocéntrico. Pero ¿qué sucede si nos paramos a contemplar a quienes son infinitamente más pequeños que nosotros? A veces, identificarnos con algo que no se nos parece en absoluto nos ofrece la posibilidad de entender la complejidad de la realidad desde una nueva perspectiva», reflexiona Vola.
Escrito a la manera de un tratado pseudocientífico, este álbum logrará persuadir al lector de la importancia de conocer la vida de este gusano rosa y gritar: «¡Las lombrices importan!».