7 libros que han tratado sobre las apuestas y el juego

Los etnólogos saben que el juego como tal fue creado por la humanidad para disfrutar de un momento divertido. Esa situación continúa incluso hoy, cuando los jugadores de apuestas están emocionados de probar nuevos retos. Para ello lo mejor es localizar las mejores casas de apuestas de España, que están en Gainblers donde encontrarás pronósticos y grandes premios por participar en la Tipster League. Con el tiempo, estos juegos de apuestas y casinos en línea se incluyeron como una forma de entretenimiento para los fanáticos. 

Historias en las que los casinos tienen un rol importante

El presente del juego, de los casinos virtuales y de jugar a woonsters pasa por su alcance global y por la cantidad de jugadores que tienen acceso a los juegos. Los jugadores experimentan las mejores alternativas de juego sin moverse del lugar en donde se encuentran. Esa es una de las razones por la cual los juegos de casino en línea han alcanzado gran popularidad. Por eso, la literatura ha tomado las historias antiguas y las nuevas sobre la suerte y los casinos para hacerlas propias y contarlas de diferentes formas.

Las primeras menciones literarias sobre el juego, además de las reglas de algunos juegos escritos por los chinos, provienen de la antigua Grecia, en donde se contaban leyendas míticas sobre los juegos en los que participaban los mismos dioses.

Desde entonces han sido muchas las manifestaciones de la cultura en las que la pasión de las personas por los juegos se ha manifestado de forma explícita. Estas manifestaciones han contribuido a la creación de muchas historias épicas sobre jugadores y casinos. 

Destacamos a continuación 7 libros que han tratado sobre el juego y los casinos en los últimos dos siglos

El jugador de Fiódor Dostoievski (1867)  

En medio de una galería de personajes que deambulan desarraigados, la figura de Aleksei Ivanovich personifica el goce, la angustia y el equilibrio entre sus pasiones: el juego ligado a la dependencia absoluta de sus relaciones amorosas.

Casino Royale de Ian Fleming (1953)

Esta novela supone la primera aparición del personaje James Bond, a la que seguirían once novelas más. Es esta y sus secuelas las apariciones de 007 en diferentes casinos son habituales. Hoy en día seguramente participaría también en las casas de apuestas demostrando que es el que más sabe del Mundial de Fútbol.

Miedo y asco en Las Vegas de Hunter S. Thompson (1971)

Esta novela es una de las más demenciales de Hunter S. Thompson, figura legendaria del nuevo periodismo y creador del llamado periodismo «gonzo». La trama se centra en el viaje del propio Thompson, bajo el seudónimo de Raoul Duke, y de su abogado, Oscar Zeta Acosta alias Dr. Gonzo, en dirección a una surrealista Las Vegas, para hacer algunos reportajes y, sobre todo, alcanzar el gran sueño americano

Apocalipsis de Stephen King (1978)

El casino como espacio pierde protagonismo en esta novela y se convierte más bien en un elemento más de la ambientación. La historia se sitúa en un futuro postapocalíptico, en el que un virus gripal, creado de forma artificial como arma bacteriológica, se expande por todo el mundo provocando la muerte de la mayor parte de la población.

Los tontos mueren de Mario Puzzo (1978)

Los tontos mueren es el siguiente libro de Mario Puzzo después de la publicación de El Padrino. La novela trata sobre John Merlyn, un aspirante a escritor y funcionario del ejército que viaja a Las Vegas, donde conoce a Cully, un jugador profesional en bancarrota y estafador de tres al cuarto.

Leaving Las Vegas de John O’Brien (1990)

Ben Sanderson es un guionista alcohólico que después de divorciarse cae en una espiral de autodestrucción que le lleva a ser despedido por el estudio de producción donde trabaja. Ben decide irse a Las Vegas, la cuidad donde los bares nunca cierran.

América de James Ellroy (1995)

América, en realidad es la primera parte de una trilogía, la de los bajos fondos, continuada con Seis de los grandes y Sangre vagabunda. Las tres novelas narran una saga de que va finales de los cincuenta y principios de los sesenta donde Las Vegas y sus casinos tienen una fuerte presencia.

Ni todo lo que ocurre en Las Vegas se queda en Las Vegas, ni todas las historias literarias han tenido lugar en esta ciudad, aunque es el espacio de muchas de las novelas que hemos seleccionado. Lo que sí es una constante es la conformación del casino como espacio físico. ¿Quién sabe si dentro de unos años este subgénero no evolucionará para mostrarnos las aventuras y desventuras de los personajes en portales cibernéticos, en casinos online o jugando cómodamente a woosterns desde su casa?