Leer es uno de los pasatiempos y una de las aficiones más prácticas y enriquecedoras que existen, puesto que permite al lector identificarse con la obra, de manera que puede introducirse en un mundo que no es el suyo. Por ello, la lectura de la poesía es de lo más estimulante, haciendo que se puedan vivir emociones ajenas.
La poesía puede expresar un gran conjunto de emociones, no solo el amor, siendo un método de expresión utilizado por muchas personas y que mejora convenientemente su forma de mirar la vida. Justo por esta razón, cuando se tiene tristeza encima o se busca un detalle de despedida, la poesía puede ser un aliado de incalculable valor.
En este sentido, es indispensable conocer y tener a mano algunos libros de poesía triste, especialmente diseñados para hablar de amor, desamor y despedidas, desde un punto de vista artístico y profundamente hermoso.
Poesía triste
Al igual que la música, la poesía puede traer algún tipo de consuelo al alma si se encuentra herida, generando un ambiente mucho más seguro, donde poder analizar los sentimientos y facilitar su superación.
Por ello, estos tristes poemas para despedirse son una fuente de apoyo para decir lo que se desea expresar sin la necesidad de utilizar palabras propias, sino utilizando un lenguaje mucho más poderoso que dejará huella para siempre.
Lo mejor es que, según la intención, se puede disfrutar de poemas largos o cortos, creando largas cartas hermosas o pequeñas notas, que faciliten la transición y el hecho de poder dejar a la persona amada libre de ese peso.
La piel en los labios
Si de poesía triste moderna se trata, lo mejor es tomarse el tiempo para revisar este ejemplar de manos de Miguel Gane. En realidad, este autor está graduado en Derecho y ADE, pero su pasión por los poemas lo han llevado a ser muy famoso entre los jóvenes.
Su fama se debe a que hace un buen uso de los aspectos sensoriales y sensuales, para darle un espacio al amor desde su inicio hasta el final, generando una propuesta que cualquier lector sabrá aprovechar en su beneficio.
Pensamientos estériles
Consagrada como una poeta referente para el panorama literario de la actualidad, Luna Miguel presenta este nuevo libro de poemas cargado de rebeldía, donde no solo vuelca su tristeza por cómo funciona el mundo hoy en día, sino que pone de manifiesto los placeres, las ambiciones y las creencias que han ocasionado este caos, generando un ambiente de crítica bien definido.
Lo mejor es que une todo en un solo proceso: la juventud como una enfermedad, la poesía como la juventud y la enfermedad como la propia poesía.
La inercia del silencio
Si de poemas tristes y reflexivos se trata, este libro invita a las personas a tomarse un momento para analizar todo lo que traen con ellos. Su premisa permite analizar los efectos del silencio en función de una conversación de una niña y la mujer en la que se va convirtiendo.
En su lírica se va haciendo la visualización de la convivencia con el silencio, y cómo influyen los miedos y la superación de los mismos en la personalidad del ser humano resultante.
Da dolor
Este es un libro más que todo feminista, pero que trata los problemas normales que puede tener una persona a lo largo de su vida, como: la muerte, las relaciones maternas, y la aceptación y la crítica a los comportamientos sociales asociados a las mujeres.
Su contexto está muy bien definido, brindando a los lectores una gran cantidad de emociones, especialmente tristes, sobre lo que deben vivir, relacionando la pérdida con la vida y la vida con la muerte, de muchas maneras distintas.
Tomar el tiempo necesario para leer poesía es tener el deseo de vivir emociones y sentimientos de otras personas, conociendo sus temores y haciéndolo todo personal, para un mejor disfrute y entendimiento del contenido al que se hace referencia. Además, dedicar poemas es una de las mejores maneras de despedirse de la vida de alguien que fue especial.