En octubre, al celebrar el 125 aniversario del Book Review, invitamos a los lectores a nominar el mejor libro publicado durante esos años. Era un guiño a nuestra historia: en sus primeras décadas, el Book Review a menudo pedía a los lectores que eligieran los mejores libros, los mejores relatos, los mejores poemas. Queríamos que este proyecto, como aquellos del principio, reflejara los gustos y preferencias de los lectores.
Las respuestas comenzaron a llegar desde los 50 estados y 67 países. En noviembre, presentamos una lista de los 25 libros más nominados (uno por autor) para la votación. Tras el recuento de más de 200.000 votos, el ganador, por un estrecho margen, es…
EL GANADOR
Matar a un ruiseñor
Por Harper Lee
“Crecí en una pequeña e insular ciudad blanca y protestante del oeste, y este libro me expuso por primera vez a la crueldad del racismo. Creo que cambió mi vida y me convirtió en una persona que se preocupa por la justicia social. Además, está bellamente escrito, con personajes que he amado toda mi vida. Siempre quise ser Scout”.
La encuesta fue realizada en octubre del 2021, para el aniversario 125 del Book Review, el influyente suplemento literario del New York Times, y fue enviada principalmente a sus lectores, casi todos norteamericanos. La pregunta era simple, ¿cuál es el mejor libro de los últimos 125 años?
En noviembre se presentó un primer corte con los 25 libros más votados (uno por autor). En este primer post te ofrecemos esa lista de 25 libros elegidos por los lectores de Book Review.
Pero eso 25 quedaron reducidos a 5. Te presentamos a los 5 finalistas
1.- 1984, de George Orwell;
En el año 1984 Londres es una ciudad lúgubre en la que la Policía del Pensamiento controla de forma asfixiante la vida de los ciudadanos. Winston Smith es un peón de este engranaje perverso y su cometido es reescribir la historia para adaptarla a lo que el Partido considera la versión oficial de los hechos. Hasta que decide replantearse la verdad del sistema que los gobierna y somete.
2.- Beloved, de Toni Morrison;
Para escribir esta magnífica historia, merecedora del Premio Pulitzer, Toni Morrison se inspiró en la vida real de una esclava afroamericana, Margaret Garner, que en 1856 escapó de una plantación en Kentucky y consiguió llegar al estado libre de Ohio. A punto de ser recapturada, Margaret tomó la trágica decisión de sacrificar a su hija para salvarla de una vida en cautiverio.
En estas páginas, Sethe es la esclava prófuga que vendió su cuerpo para grabar el nombre de su hija muerta en la lápida: diez minutos por «Beloved», veinte por «Querida Beloved». Muchos años después, Sethe vive en Ohio con Denver, su hija adolescente, y Paul D., un viejo amigo que también fue esclavo. Todos intentan prosperar y olvidar el pasado, hasta que un día aparece una joven que dice llamarse Beloved. Tiene la edad que tendría su hija si viviese y sabe ciertas cosas que sugieren que podría serlo
3.- El señor de los anillos: la comunidad del anillo, de J.R.R. Tolkien;
En la adormecida e idílica Comarca, un joven hobbit recibe un encargo: custodiar el Anillo Único y emprender el viaje para su destrucción en la Grieta del Destino. Acompañado por magos, hombres, elfos y enanos, atravesará la Tierra Media y se internará en las sombras de Mordor, perseguido siempre por las huestes de Sauron, el Señor Oscuro, dispuesto a recuperar su creación para establecer el dominio definitivo del Mal.
4.- Matar un ruiseñor, de Harper Lee;
Jean Louise Finch evoca una época de su infancia en
Alabama, cuando su padre, Atticus, decidió defender
ante los tribunales a un hombre negro acusado de violar
a una mujer blanca. Novela de iniciación, Matar a un
ruiseñor muestra una comunidad, la del sur de Estados
Unidos durante la década de 1930, dominada por los
prejuicios raciales, la desconfianza hacia lo diferente y
la rigidez de los vínculos familiares y vecinales, así como
por un sistema judicial sin apenas garantías para la población
de color.
5.- Cien años de soledad, de Gabriel García Márquez.
«Muchos años después, frente al pelotón de fusilamiento, el coronel Aureliano Buendía había de recordar aquella tarde remota en que su padre lo llevó a conocer el hielo. Macondo era entonces una aldea de veinte casas de barro y cañabrava construidas a la orilla de un río de aguas diáfanas que se precipitaban por un lecho de piedras pulidas, blancas y enormes como huevos prehistóricos. El mundo era tan reciente, que muchas cosas carecían de nombre, y para mencionarlas había que señalarlas con el dedo.»
Con estas palabras empieza la novela ya legendaria en los anales de la literatura universal, una de las aventuras literarias más fascinantes de nuestro siglo. Millones de ejemplares deCien años de soledad leídos en todas las lenguas y el Premio Nobel de Literatura coronando una obra que se había abierto paso «boca a boca» -como gusta decir al escritor- son la más palpable demostración de que la aventura fabulosa de la familia Buendía-Iguarán, con sus milagros, fantasías, obsesiones, tragedias, incestos, adulterios, rebeldías, descubrimientos y condenas, representaba al mismo tiempo el mito y la historia, la tragedia y el amor del mundo entero.