Nadia está a punto de llegar a la cuarentena y se dirige hacia Ibiza para supervisar las obras de Sa Marea, una casa que han comprado ella y Marcos, su marido. El matrimonio no atraviesa su mejor momento. La imposibilidad de tener hijos, que en un principio no les afectó como pareja, ahora aparece con frecuencia en los pensamientos de Nadia. Por otra parte, la rutina en la que ha caído su relación le produce un vacío existencial que no llena ni su actividad profesional ni su vida social, cada vez menos activa.
“La compra de Sa Marea fue solo un espejismo en medio del desierto de nuestro matrimonio.”
Lo que esconde el mar : Lucía Mallén – Roca Libros