| La obra de Mircea Cărtărescu
Mircea Cărtărescu es poeta, narrador y crítico literario, y está considerado el más importante autor rumano de la actualidad. Más allá de las fronteras de su país, es uno de los más célebres teóricos del posmodernismo europeo, y ha recibido galardones internacionales como el Premio Formentor de las Letras (España, 2018), el Premio Thomas Mann de Literatura (Alemania, 2018), el Premio Gregor von Rezzori (Italia, 2016), el Premio del Estado Austriaco a la Literatura Europea(Salzburgo, 2015), el Premio Euskadi de Plata (España, 2014), Caballero de la Orden de las Artes y las Letras (Francia, 2008), entre otros.
De su obra poética destaca El Levante (1990; Premio de la Unión de Escritores Rumanos), que Impedimenta recuperó en 2015 en una versión especialmente preparada por el autor. Cărtărescu dio el salto a la narrativa con el volumen de cuentos Nostalgia (1993; Impedimenta, 2012; Premio de la Academia Rumana), que se abre con su célebre relato «El Ruletista» (publicado de modo independiente por Impedimenta en 2010). Siguió Lulu (1994; Impedimenta, 2011), novela tortuosa y genial que indaga en el misterio del doble y que le valió el Premio ASPRO. En 2010 publicó el volumen de cuentos Las Bellas Extranjeras (Impedimenta, 2013; Premio Euskadi de Plata de Narrativa), una sátira rayana en lo grotesco que narra secuencias de la vida literaria genuinamente rumanas pero también cosmopolitas, y que se ha convertido en un auténtico éxito de ventas en su país, así como El ojo castaño de nuestro amor (2012; Impedimenta, 2016), un volumen de relatos autobiográficos que sirve como nexo para entender el conjunto de su obra.
En 2015 publicó la novela Solenoide (Impedimenta, 2017), que ha sido elegida como Libro del Año por medios culturales de referencia como Babelia, El Cultural, ABC Cultural, El Periódico, La Vanguardia, WMagazin o Eñe… Esta obra lo ha llevado a ser comparado con escritores como Pynchon, Kafka y Kundera. Estamos ante el largo diario de un escritor frustrado que desgrana su infancia y su adolescencia en los arrabales de una ciudad comunista, devastada, gris y fría. Profesor de Rumano en un instituto de barrio, con una carrera literaria fracasada y una profesión que no le interesa, compra una casa antigua con forma de barco, construida por el inventor de un solenoide, que alberga una extraña maquinaria: un sillón de dentista dotado de un tablero de mandos.
El próximo mes de septiembre, la editorial Impedimenta publicará el primer volumen de su aclamada trilogía Cegador, la cual Mircea Cărtărescu tardó más de una década en escribir, y que está considerada unánimemente como su obra maestra. En ella, un Mircea niño, en su Bucarest natal en plena década de los 60, imagina desde su ventana un universo que es una mezcla de mundos soñados, de la modernidad que llega a su país con cuentagotas, una extraña combinación de autobiografía onírica y saga familiar «edípica».
Premio Formentor de las Letras 2018
El pasado mes de abril, Mircea Cărtărescu fue galardonado con el Premio Formentor de las Letras. El jurado, que se reunió para la deliberación en la Biblioteca Nacional de Argentina, y que estuvo presidido por Alberto Manguel (Premio Formentor 2017) y compuesto por Aline Schulman, Francisco Ferrer Lerín, Andrés Ibáñez y Basilio Baltasar, destacó «la poderosa habilidad narrativa del autor y su excepcional conocimiento de la biblioteca universal». Este galardón está dotado con 50 000 euros y reconoce el valor del conjunto de la obra de un autor de proyección internacional. Será entregado el 28 de septiembre en una solemne ceremonia que tendrá lugar en el marco de las tradicionales Conversaciones Literarias de Formentor, en la isla de Mallorca.
Para el jurado, la obra de Mircea Cărtărescu «integra en un único ímpetu narrativo la evidencia de la realidad, la cartografía de la memoria, la energía creativa del sueño, la libertad de la imaginación y la pulsión de los deseos». Además, han subrayado «la fuerza narrativa con que el autor ha sabido expandir los límites de la ficción».
El Premio Formentor nació en los años sesenta, gracias al patrocinio de Carlos Barral, que organizó una serie de reuniones literarias de novelistas, editores y críticos europeos. Tuvo sus años de esplendor entre 1961 y 1967, época en la que convocó dos premios: el Premio Internacional, el cual distinguía a un autor de prestigio internacional y que ganaron Samuel Beckett, Jorge Luis Borges y Saul Bellow, entre otros, y el Premio Formentor, que galardonaba una novela presentada por las editoriales participantes, y que respaldó a autores como Jorge Semprún y Gisela Elsner.
Este galardón se convirtió en toda una referencia de la vanguardia literaria europea. A los pocos años fue suspendido pero inició una nueva etapa en 2011, medio siglo después de su aparición, gracias al mecenazgo de la familia Barceló, propietaria del Hotel Formentor donde se realizan las Conversaciones Literarias, y la familia Buadas, propietaria del edificio en la década de los sesenta. Desde entonces ha distinguido a autores como Carlos Fuentes (2011), Juan Goytisolo (2012), Javier Marías (2013), Enrique Vila-Matas (2014), Ricardo Piglia (2015), Roberto Calasso (2016) y Alberto Manguel (2017). |
