El Caminante – Natsume Sōseki

La editorial Satori especializada en la literatura japonesa ofrece como su primer libro editado nada menos que El caminante de Soseki, obra madura y elaborada del escritor que ha encandilado recientemente a los españoles gracias a las nuevas traducciones de su obra que ha publicado Impedimenta. Este título supera literariamente a los anteriores Botchan y Sanshiro tanto por su estilo mucho más depurado como por el avance psicológico de sus personajes, pero sobre todo sorprende por ser una novela en primera persona cuyo narrador no es el personaje principal. Esta triple pirueta de Soseki convierte a El caminante en una obra que merece que le dediquemos mucho tiempo para explorarla completamente. LEER MÁS


Jiro es ese narrador autobiográfico con muchas carencias afectivas, poca decisión y propenso a que otros le utilicen, cuya vida esta marcada por la existencia de su hermano mayor Ichiro, verdadero protagonista de la novela al que solo conoceremos a partir de la segunda parte. La primera sirve para sentar las bases de Jiro, la segunda presenta la situación que motiva la obra: las relaciones familiares de Jiro, la tercera, Después del regreso lleva la tensión a la trama la cual explotará en la cuarta parte.

Los tratos de Jiro con sus amigos, con las mujeres de ellos, con su cuñada y con su madre son el telón de fondo de la verdadera actividad, la vida infructífera y amargada del primogénito Ichiro. Dotado por la tradición japonesa del papel preponderante en su familia y por sus estudios de la primacía intelectual resulta incapaz de soportar tal peso sucumbiendo ante todo paulatinamente. Ese retrato lento de una situación periférica que realmente es la principal demuestra el oficio adquirido por Soseki.

Soseki perfecciona su costumbre ya usada en Botchan y Sanshiro de retratar imágenes con poco movimiento, ralentizarlas hasta lo inverosímil y hacerlas posar, tal como un pintor haría con sus modelos, para nuestro deleite. Con está técnica Soseki sólo describe la situación, no la juzga, no determina el resultado, no valora los porqués, nos deja en esa tierra de nadie rodeados de personajes apáticos y faltos de actividad vital, sin sangre en las venas, precursores de los protagonistas de sus admiradores como Murakami. Sin embargo, nos ha resultado muy interesante el planteamiento de algunos estudios sobre la obra de Soseki en general referentes a la relación de su forma de escribir con la pintura. Y es que todas las escenas que nos ofrece el autor tienen la composición estática de los obras de los grandes pintores, casi ninguna nos ofrece movimiento real, sino estabilidad y equilibrio, sosiego y descripción. Incluso ralentiza hasta la cámara superlenta algunos movimientos de los personajes, sobre todo las mujeres de la narración, para mostrarnos en su esplendor esos frescos inmóviles, esos lienzos coloridos de gran valor artístico, que pueden suponer un fin en sí mismos dentro del estilo del escritor.

Nueva editorial, genial escritor y una de sus mejores obras, ¿se puede pedir más? Disfrútenla.

Marc Canela

FICHA DEL LIBRO

Título: El Caminante | Autor: Natsume Sōseki | Editorial: Satori | Páginas: 412 | Precio : 24€ |