Los asesinos lentos – Rafael Balanzá

PREMIO DE NOVELA CAFÉ GIJÓN 2009

Balanzá es capaz de revisitar a Kafka dotando a la primera frase de su libro del valor absoluto de la trama, a la vez que mantiene el interés de la misma con giros radicales, evoluciones psicológicas que enrocan a los personajes… y al final, le sobra energía para ejecutar un vistoso salto acrobático que cierra del círculo de una obra redonda, fresca e intemporal a la cual auguramos larga vida. (leer más)


Charlando con Valle en un café, después de una conversación sobre los viejos tiempos, éste le anuncia a su amigo Cáceres a bocajarro que va a matarle, que había decidido matarle y que sucedería pronto. Con este comienzo ‘a tumba abierta’, radical sin paliativos, consigue el actual premio Café Gijón echarnos el anzuelo. ¿Quién se resiste a esto? Kafka inició La metamorfosis y El Proceso con órdagos semejantes, situaciones que hacen surgir multitud de preguntas y que nos incitan a pedirle al autor que desembuche de inmediato los porqués, cómos y cuándos de tamaña tentativa.

No descubriremos más de la trama, pero queremos anticiparles que la vida de Juan Cáceres es en apariencia ideal, mientras que la de Valle no ha resultado tal y como esperaba, aunque le sirve para ir tirando. Debemos añadir que a partir de ese momento es cuando la futura víctima analiza su vida encontrando sorpresas, y que lo mejor seguramente del libro -aparte del comienzo- es el giro radical que a mitad de libro ‘enroca’ -y nunca un término ajedrecístico explica mejor los hechos- a ambos personajes, para correr a toda velocidad hasta un final pausado, reflexivo, con imágenes a cámara lenta tomadas del cine negro que nos dejan una sonrisa y un muy buen sabor de boca.

Tragedia griega que puede extrapolarse a cualquier época y cualquier país, personajes que dialogan de verdad enfrentados dentro de su amistad, e ingeniosos trucos literarios para alargar el clímax final: un relato del alter ego del escritor y una morbosa sesión de vídeo adolescente completan un libro honesto, bien escrito, compuesto sin presiones editoriales ni comerciales de ningún tipo.

Balanzá pide un hueco en el mundo literario actual, con paso firme y con la autoridad que le da el hacer las cosas bien hechas, con buen gusto, sabiendo mantenernos en tensión, enseñándonos a tener miedo de nuestros miedos y creando un clásico donde sólo había una tienda de mascotas en un centro comercial.

Enhorabuena a él por el premio y al jurado por la valentía de elegirle.

Durante los próximos días colgaremos también la entrevista con el autor.

RESEÑA DE LA EDITORIAL

Valle y Cáceres formaron parte en los noventa de un grupo de pop rock. Ensayaban juntos, tocaban juntos, se emborrachaban juntos. Llevan muchos años sin verse cuando se encuentran en un café. Allí charlan animadamente y recuerdan, entre risas, anécdotas del pasado. Después Valle le anuncia a su amigo que ha decidido matarlo y que lo hará pronto. El resto de la novela viene a ser algo así como la onda expansiva de esta primera revelación, a partir de la cual el relato avanza trepidante hasta un desenlace sorprendente y extrañamente lírico que dejará al lector sin aliento.

El jurado del Premio Café Gijón destacó la «audacia narrativa» de la obra de Rafael Balanzá, «cuya trama se sustenta en una estructura muy bien construida que mantiene en vilo al lector, llevándolo a un desenlace ingenioso e inesperado».

Ficha del Libro

Título: Los asesinos lentos |Autor: Rafael Balanzá | Editorial: Siruela | Páginas: 160 | Precio : 15,90€