Por: Eduardo Maestre.
El escritor español Avelino Martínez Granados publica una novela sobre un viajero que descubre que la realidad es un entramado de manipulaciones.
Estamos ante una novela que se podría definir como de aprendizaje. El descubrimiento lo protagoniza Ludas, un neuropsíquico interesado en conocer la mentalidad del ser humano en las diferentes culturas. Como en las novelas de Peter Handke, este hombre emprende un viaje por el mundo. Sin embargo, su plan toma un giro inesperado apenas comienza. Lo que pensó sería un viaje de placer se convierte en un camino de situaciones inesperadas.
“Los dormidos” es una novela reflexiva con tintes de intriga, lo que la convierte en una obra amena para el lector. Amena pero no complaciente. La reflexión tiene que ver con nuestra propia noción de la realidad. El autor se hace preguntas a través de los personajes y de las situaciones, ¿qué cosa es aquello que llamamos realidad? ¿Qué poder condiciona lo que llamamos destino?
Avelino Martínez Granados es psicólogo, lo que se percibe en su forma de crear la historia y en las características de los personajes. La novela va dejando preguntas y revelaciones. Su desarrollo opera como un desmontaje de las verdades absolutas; desmantelamiento que ocurre a través del recorrido de Ludas. La ruta se abre como las capas de una cebolla. El personaje está creado para que el lector descubra a través de su mirada.
‘Los dormidos’ contiene conversaciones profundas, en su filosofía la novela nos interroga, es su dinámica preguntarse sobre los cambios de nuestra sociedad en cien años. La manipulación del poder, la educación, la política, la tecnología, son factores presentes en el viaje que nos propone. Como si el movimiento derribara ideas fijas, el argumento nunca es estático. En el trayecto aparece Siu, una mujer que dice formar parte del gobierno. A partir de entonces se activan una serie de acontecimientos que dejan amor, deseo y confusión. No todo es lo que nos contaron, surgen muchas dudas, hasta se termina dudando si el progreso de la sociedad era tal.
Ludas llega a creer que ha perdido el sentido común, ¿acaso el lector no tendrá que hacerse el mismo planteamiento? Los sentimientos se confunden y la enajenación hace de la razón una cárcel. A medida que avanzamos en la lectura es posible que terminemos creyendo que hemos entrado en la mente de alguien. ¿La de Ludas? ¿La de un cercano? ¿La nuestra?
Avelino Martínez Granados (Taberno, Almería) es una persona polifacética. Ha sido fotógrafo y empresario, dirigiendo por más de veinte años una empresa de vidrio para iluminación. Ha dirigido un video- documental sobre el poeta Paco Molla. Publicó el libro ‘Respuestas distintas a preguntas frecuentes’, y desde niño se ha considerado un buscador.