Javier Marías entre la crónica deportiva y el artículo de opinión levanta un monumento a la memoria personal y colectiva de nuestra sociedad. “Salvajes y sentimentales. Letras de fútbol (Alfaguara, 2010) es una libro de esos que se pueden repasar como reencuentros con viejos amigos, como fotos que convocan recuerdos y alegrías. (leer más)
Porque la ruda lucha entre el intelecto y el músculo no debe durar mucho más: en el fútbol caben todas las pasiones, cabe la épica, la estética, caben los heroísmos e incluso da tiempo a la picaresca y a la saga de matones. Porque en el fútbol también hay malos malísimos como en los libros.
Para los seguidores de Javier Marías y para quienes no lo son tanto, este es un libro que no les va a dejar indiferentes. Se nota en estos textos que el escritor se siente libre, parece volver con seguridad a sus pasiones y recuerdos. Se encuentra, en el terreno del fútbol, con una libertad tanto estética como técnica que le hace solventar con elegancia cada uno de estos textos que son como una jugada limpia en el área pequeña.
Y da igual que sean ustedes o no fanáticos del fútbol: aquí hay para todos los gustos y para todos los colores. Estas son crónicas sentimentales de España, son recuerdos que revelan mucho de dónde venimos. Vistos por los ojos de Marías los hechos cobran la singularidad de las buenas novelas.
Aquí se habla del Madrid, de Barça, nos encontraremos con un jovencísimo Guardiola, con lo graciosos que sería ponerle letra a nuestro himno para que lo canten nuestros chicos en las citas deportivas. Marías tiene para todos y sobro todo tiene para todos muy buena literatura.
El prólogo de Paul Ingendaay, escritor y crítico alemán, da buena cuenta de cómo estos artículos han calado muy bien en Alemania. Abre aludiendo a la pasión de Camus por el fútbol y cierra con una frase acertadísima. No importa la religión sino el talento del misionero. Estos textos entonces pueden convertirse en una suerte de texto sagrado para convertir a los escépticos del fútbol. Es más, es muy probable que tengamos que leer el fútbol con otra clave, con otra mirada. Este es un espectáculo al que haremos bien en prestarle más atención.
Pedro Crenes
SINOPSIS
La supuesta incompatibilidad entre las letras y el fútbol ya fue desmentida por algunos clásicos modernos: tanto Nabokov como Camus ocuparon puesto de portero en sus respectivas juventudes, y el segundo dijo que cuanto de importante sabía acerca de la moral humana lo había aprendido en el fútbol.
A ellos se une el novelista Javier Marías (que fue extremo izquierdo en la infancia) con esta colección de piezas futbolísticas en las que tampoco la moral está ausente. Escribir de este deporte es para él «un descanso», lo cual debe entenderse, según apunta Paul Ingendaay en su prólogo, como la oportunidad de abandonar las máscaras de la ficción e instalarse en un territorio en el que «las cosas están claras y el autor se siente seguro de sus pasiones y sus recuerdos». Para Marías el fútbol es la «recuperación semanal de la infancia»; y también es temor y temblor, dramaticidad y zozobra , una mezcla de sentimentalidad y salvajismo, una escuela de comportamiento y nostalgia, y la escenificación de la épica al alcance de todo el mundo.
En este libro, que incorpora treinta nuevos textos, se habla de jugadores y aficionados, entrenadores y presidentes, derrotas y triunfos, de emoción y vergüenza; también del carácter casi cinematográfico de este deporte, de la cuidadosa memoria y el rápido olvido, del patriotismo, la celebración de los goles, los himnos, los andares y gestos llenos de significado. Y vemos el fútbol como lo que seguramente es, en el fondo, para millones de aficionados: un interminable desfile de héroes, villanos, figurantes y gestas, un espectáculo que quizá merece la pena tomarse en serio.
Título: Salvajes y sentimentales | Autor:Javier Marías | Editorial: Alfaguara | Páginas 320 | Precio 17,50€ |