Hoy seleccionamos los mejores libros de los autores que se nos han ido en 2022
El último barco de Domingo Villar
La hija del doctor Andrade vive en una casa pintada de azul, en un lugar donde las playas de olas mansas contrastan con el bullicio de la otra orilla. Allí las mariscadoras rastrillan la arena, los marineros lanzan sus aparejos al agua y quienes van a trabajar a la ciudad esperan en el muelle la llegada del barco que cruza cada media hora la ría de Vigo.
Una mañana de otoño, mientras la costa gallega se recupera de los estragos de un temporal, el inspector Caldas recibe la visita de un hombre alarmado por la ausencia de su hija, que no se presentó a una comida familiar el fin de semana ni acudió el lunes a impartir su clase de cerámica en la Escuela de Artes y Oficios.
Y aunque nada parezca haber alterado la casa ni la vida de Mónica Andrade, Leo Caldas pronto comprobará que, en la vida como en el mar, la más apacible de las superficies puede ocultar un fondo oscuro de devastadoras corrientes.
Mañana en la batalla piensa en mí de Javier Marias
Una intensa narración sobre asuntos que nos atañen a todos: sobre el ocultamiento, los hechos y las intenciones; sobre el actuar sin saber y la voluntad que casi nunca se cumple; sobre la negación de las personas que una vez quisimos y el olvido y la indecisión; sobre la despedida, y también sobre el engaño.
La hechizante primera frase de esta novela ya dice mucho, quizá demasiado: «Nadie piensa nunca que pueda ir a encontrarse con una muerta entre los brazos y que ya no verá más su rostro cuyo nombre recuerda».
Esto es lo que ocurre al narrador, Víctor Francés, guionista de televisión y «negro» o «escritor fantasma», encargado de redactar los discursos de la gente importante e ignorante. Recientemente divorciado, es invitado a cenar a su casa por Marta Téllez, mujer casada cuyo marido está de viaje y madre de un niño de dos años. Tras la cena galante, el hombre y la mujer pasan al dormitorio donde, «aún medio vestidos y medio desvestidos», ella empieza a sentirse mal hasta que agoniza y muere en una escena sobrecogedora.
Esa infidelidad no consumada se convierte así en una especie de «encantamiento», con problemas bien reales e inmediatos: qué hacer con el cadáver, avisar o no avisar, qué hacer respecto al marido, qué hacer con el niño dormido, qué diferencia hay entre la vida y la muerte.
Donde yo no estaba de Marcelo Cohen
Aliano D?Evanderey es dueño de un comercio mayorista de lencería femenina. Tiene una mujer a la que adora, dos hijos jóvenes y la compulsión a observar minucias que le parecen decisivas y que todos los días descarga en un prolijo diario. Escribir es para Aliano la manera de realizar un plan vital, incluso un anhelo: adelgazar su personalidad, borrarse progresivamente, y que su espacio lo ocupe la plena diversidad del mundo que lo rodea.
Pero este camino se tuerce cuando una serie de hechos requiere su presencia para tomar decisiones: una enfermedad que podría matarlo en cualquier momento, una separación incruenta pero aciaga, el acoso de diferentes facciones políticas, el contacto con varios atribulados que confían en él y, por fin, el encuentro con Yónder, un lúmpen desquiciado, provocador, veterano de una guerra oculta, en el quien él ve una suerte de negativo suyo y que acabará involucrándolo en una crisis ciudadana. De la monotonía agradable y el plan de supresión de sí mismo, Aliano pasará a verse en dilemas impensados a la cabeza de un grupito de seres solitarios.
Esta absorbente novela de Marcelo Cohen, expansión del universo que el autor viene fraguando a lo largo de muchos libros, ofrece un relato como prueba irrefutable del vigor y la amplitud de la narrativa de hoy. Robotines, farphonitos, flycohes, un sistema político llamado Democracia Gentil, animales biónicos, manadas callejeras de perroparias , la lucha entre la religión del Pensar y la del Dios Solo, y un modo de conexión entre mentes llamado Panconciencia: tal es el universo sorprendente y burlón que atisbamos a través del diario de Aliano.
La épica del corazón de Nélida Piñón
Un libro único, íntimo y revelador, que recoge el pensamiento de la escritora brasileña ganadora del Premio Príncipe de Asturias.
Pocos escritores brasileños dominan el arte de la palabra como Nélida Piñon, una creadora siempre exuberante en todas sus formas de expresión: en la novela, en el relato o en el ensayo, del que este volumen es un claro ejemplo de talento.
La épica del corazón nos muestra el vivo interés de la autora por la tradición literaria latinoamericana y su profundo conocimiento de la misma. Allí están sus maestros y sus escritores admirados, como García Márquez.
Pero en este libro Piñon también abarca todo un continente de cuestiones, de ideas, de afectos, de pasiones y, ¿por qué no?, de obsesiones. Siempre a través de la literatura, la escritora se enfrenta a la laxitud moral de hoy en día defendiendo el lugar fundamental de las culturas que los tiempos contemporáneos quisieron asfixiar y celebrando así su resistencia. «Son ellas las que me llevan a vagar por el mundo con la imaginación.»
En la corte del lobo de Hillary Mantel
Año 1520. Inglaterra está a un paso del desastre. El rey Enrique VIII no consigue engendrar un heredero varón y quiere divorciarse de su mujer para casarse con Ana Bolena, pero el cardenal Wolsey, su principal asesor, no obtiene más que negativas del papa. En este clima de desconfianza y necesidad llega a la corte Thomas Cromwell. Su programa de reformas tiene que abrirse camino entre un parlamento que sólo vela por los intereses de sus miembros y un rey que fluctúa entre las pasiones románticas y las pulsiones asesinas.
La ciudad de la alegría de Dominique Lapierre
Un sacerdote francés, un joven médico norteamericano, una enfermera de Assam y un ex campesino indio que se gana la vida tirando de un rickshaw se encuentran un día bajo las cataratas del monzón y se instalan en el alucinante decorado de un barrio de Calcuta para cuidar, ayudar, salvar. Condenados a ser héroes, pelearán, lucharán y vencerán en medio de las inundaciones, las ratas, los escorpiones, los eunucos, los dioses, las fiestas y las setenta mil «luces del mundo» que pueblan La Ciudad de la Alegría.
Su epopeya es un canto de amor y fraternidad; un reportaje desgarrador sobre la capacidad del ser humano de superar el sufrimiento, la miseria y la desgracia, que sigue más vigente que nunca en el veinticinco aniversario de su publicación.
El diablo de los números de Hans Magnus Enzensberger
A Robert no le gustan las Matemáticas porque no las acaba de entender. Pero una noche sueña con un diablillo que pretende iniciarle en la ciencia de los números. Será el comienzo de un novedoso y apasionante recorrido a través del mundo de las Matemáticas…
Durante doce noches, Robert sueña sistemas numéricos cada vez más increíbles. Incluso los números cobran vida por sí mismos. En seguida, el diablo le hará abandonar los tópicos escolares y hará que acceda a niveles superiores que siempre había temido: quebrados, números primos, imaginarios, negativos, elevar al cuadrado, cálculo del círculo, raíz cuadrada y mucho más.
Una mujer en Jerusalén de Yehoshúa, Abraham B.
Un terrorista se inmola en el mercado de Jerusalén. Una mujer muere: era extranjera, vivía sola y nadie reclama su cadáver en la morgue. Sin embargo, Julia Ragayev tenía un trabajo; era empleada de la limpieza en una gran panificadora. Un periodista sin escrúpulos aprovecha el caso para denunciar la «falta de humanidad» de la empresa, que ni siquiera se había percatado de la ausencia de su empleada. El director de recursos humanos tiene que hacerse cargo del asunto y buscar remedio a los daños de imagen sufridos. Pero, tras asistir al emotivo entierro de la mujer, el caso se convierte para él en algo más importante que recuperar la simpatía de la opinión pública. Tendrá que devolver a Julia a su pueblo natal y su verdadero cometido consistirá en encontrar en su interior los recursos humanos necesarios para vencer la frialdad que parece extenderse sobre el mundo y sobre sí mismo.
Mis dos mundos de Sergio Chejfec
Este relato es la crónica de un caminador. De paso por una ciudad del sur del Brasil, el escritor celebra haber encontrado el parque ajustado a su situación anímica; pero poco a poco irá reconociendo que son sus propias impresiones y pensamientos, no precisamente halagüeños, los que personalizan el paisaje y sus habitantes. Aquello que empezó siendo una experiencia de hiperpercepción, que aspiraba sobre todo a la exactitud y al matiz, se convierte en un arriesgado ejercicio de hiperconciencia, que oscilará entre la lucidez y el delirio. Metáfora de otros viajes y cifra del tiempo vivido, Mis dos mundos despliega desde el Sur una incisiva mirada sobre las condiciones del presente y del pasado cercano: el efecto desintegrador de la mundialización y su apuesta por los paisajes clónicos, los extrarradios sin amparo y los habitantes indeterminados, el peaje de vacío que conllevan algunas migraciones, la convivencia urbana con las ambiguas formas de lo natural… En voz baja y de modo aproximativo, Sergio Chejfec va dibujando un cierto estado del alma (entre la decepción y el miedo, la confusión y la incertidumbre) en el que no resulta extraño reconocerse.