Los tres libros que el afamado escritor Joël Dicker recomienda

Trilogía de Estocolmo (edición estuche con los títulos: 1793 | 1794 | 1795)

Trilogía de Estocolmo (edición estuche con los títulos: 1793 | 1794 | 1795) de Natt och Dag, Niklas

La serie que ha revolucionado los cánones del thriller histórico y triunfa en toda Europa.

Un año después de la muerte del rey Gustavo III, el reino de Suecia se ha convertido en un nido de conspiraciones, suspicacias y recelos. En esta atmósfera irrespirable, Mickel Cardell, un veterano de la guerra contra Rusia, se ve inmerso en un mundo de truhanes y ladrones, mercenarios y meretrices, conspiraciones y crímenes despiadados. En compañía del sagaz abogado Cecil Winge primero, y, tras la muerte de éste, de su hermano Emil, Cardell se enfrentará al mal y la corrupción que campan a sus anchas en la sociedad sueca.

Acompañada de imágenes hipnóticas y vívidas descripciones, esta formidable trilogía es una sangrienta historia de detectives relatada con gran pericia y también un recorrido trepidante por la decadencia del reino de Suecia durante la Revolución francesa

El amor en los tiempos del cólera

El amor en los tiempos del cólera de García Márquez, Gabriel

García Márquez traza la historia de un amor que no ha sido correspondido por medio siglo. Aunque nunca parece estar propiamente contenido, el amor fluye a través de la novela de mil maneras: alegre, melancólico, enriquecedor, siempre sorprendente.

«La de don Gabriel es una sombra que ilumina. Y sigue presente […] porque es un tipo que nos pertenece todos, porque es un clásico.»
Darío Jaramillo

La historia de amor entre Fermina Daza y Florentino Ariza, en el escenario de un pueblecito portuario del Caribe y a lo largo de más de sesenta años, podría parecer un melodrama de amantes contrariados que al final vencen por la gracia del tiempo y la fuerza de sus propios sentimientos, ya que García Márquez se complace en utilizar los más clásicos recursos de los folletines tradiciones. Pero este tiempo -por una vez sucesivo, y no circular-, este escenario y estos personajes son como una mezcla tropical de plantas y arcilla que la mano del maestro moldea y con las que fantasea a su placer, para al final ir a desembocar en los territorios del mito y la leyenda. Los jugos, olores y sabores del trópico alimentan una prosa alucinatoria que en esta ocasión llega al puerto oscilante del final feliz.

«Era inevitable: el olor de las almendras amargas le recordaba siempre el destino de los amores contrariados. El doctor Juvenal Urbino lo percibió desde que entró en la casa todavía en penumbras, adonde había acudido de urgencia a ocuparse de un caso que para él había dejado de ser urgente desde hacía muchos años. El refugiado antillano Jeremiah de Saint-Amour, inválido de guerra, fotógrafo de niños y su adversario de ajedrez más compasivo, se había puesto a salvo de los tormentos de la memoria con un sahumerio de cianuro de oro.

Encontró el cadáver cubierto con una manta en el catre de campaña donde había dormido siempre, cerca de un taburete con la cubeta que había servido para vaporizar el veneno.»

El lobo estepario

El lobo estepario de Hesse, Hermann

Encrucijada de todas las obsesiones e intuiciones de Hermann Hesse (1877-1962) y exponente de su singular talento para el relato, El lobo estepario se inscribe dentro del empeño, patente a lo largo de toda su obra, por iluminar la zona oscura de la condición humana a fin de poner al descubierto su carga trágica y su incierto destino. 

Ser solitario e incomunicado, extraño y extrañado, Harry Haller, protagonista de esta emblemática novela, ha acabado convirtiéndose en un arquetipo literario en el que se reconocen quienes padecen los efectos deshumanizadores de una sociedad que no conoce la solidaridad y propicia el aislamiento.