Alejandra Arévalo:“Ser editor independiente es arriesgar por amor al arte”

Conversamos con una creadora integral que no dejará indiferente a ningún amante de los libros. Escritora, ilustradora y editora de Carola Mía Ediciones, Alejandra Arévalo (Madrid, 1973) declara una serie de principios a favor de la edición independiente entendida como un vínculo entre sello, escritor y lector. Si algo tiene claro es que no ha llegado al medio literario para repetir esquemas ni para complacer tendencias.

Por: Pablo Granados.

Pregunta: – ¿Cómo nace la idea de fundar un sello editorial y por qué Carola Mía?

Respuesta: – No lo consideraría como la idea de fundar sino como la consecución de una serie de circunstancias que dan lugar a ello. Tras un tropiezo, lo que queda es levantarse y seguir. En este caso, después de lavarme las heridas decidí continuar con un proyecto que tenía en mente, pero a mi manera. La idea del nombre fue algo que yo calificaría como mágico. El sello tiene el nombre de mi abuela Carola, y creo que, de alguna manera, aunque ya no esté conmigo, me ayudó a que este saliera adelante.

P: – ¿Cuál es el perfil de tu editorial?

R: – Carola Mía Ediciones es un sello que nace desde el corazón. No me interesa competir por ser un tiburón editorial ni por sacar títulos en masa. Prefiero caminar despacio, pero con sentido, cuidando cada obra como si fuese algo único. El perfil está ligado a lo artesanal, a lo íntimo, a lo que tiene alma. No me importa publicar pocos títulos al año, sino hacerlo con una dedicación absoluta, tanto en lo literario como en lo visual. Me gustan los libros que provocan algo más allá del entretenimiento. Quiero que cada libro sea una pequeña obra de arte que se quede en la mesilla del lector.

P: – ¿Qué diferencia a Carola Mía en la relación escritor, lector?

R: – La cercanía. En Carola Mía no hay jerarquías invisibles, ni muros. El escritor está en el centro, pero también lo está el lector. El libro es un puente entre ambos. No edito para cumplir con un calendario comercial, sino cuando siento que hay algo valioso que compartir. Cada autor que publica con Carola Mía es escuchado, acompañado, y cada lector que nos elige encuentra algo más que un producto: arte ligado a las letras y a la ilustración.

P: – ¿Cómo definirías a una editorial independiente, más allá de lo que se dice?

R: – Para mí, una editorial independiente es aquella que puede decir «no» sin miedo. Es la que no depende de las tendencias para decidir qué vale la pena publicar. Es libertad, pero también es responsabilidad y mucho trabajo. Es ser fiel a una visión, incluso cuando no es la más rentable. Es arriesgar por amor al arte, literalmente.

P: – Además de editora, eres escritora y dibujante. ¿Todas estas facetas van juntas o una de ellas impulsa a las otras?

R: – Van absolutamente de la mano. A veces es difícil trazar una línea entre dónde acaba una y empieza la otra. Hay días en los que escribo como si estuviera dibujando, y otros en los que ilustro pensando en palabras. La edición, en mi caso, es el espacio donde confluyen ambas. Me permite cuidar las obras de otros como me gustaría que cuidasen las mías. Y todo eso, sin duda, se retroalimenta.

P: – “Relatos felinos del Japón eterno” es la nueva producción del sello, ¿de qué va?

R: – Es una antología ilustrada que fusiona dos mundos cargados de misterio y belleza: los gatos y el alma ancestral del Japón. Veinte autores se adentran en el folklore, la estética y la espiritualidad nipona para dar vida a historias protagonizadas por estos seres enigmáticos que transitan entre lo real y lo sobrenatural. Cada relato es una ofrenda al lector: hay magia, fantasía, melancolía, hay sabiduría milenaria en cada página. Todo envuelto en una cuidada edición ilustrada que convierte este libro en un objeto de arte.

P: – Como escritora, tu nueva obra se titula “Cuando los árboles pierden las hojas”, un libro escrito en prosa poética. ¿Cómo ha sido la acogida?

R: – Ha sido una experiencia muy bonita y, sobre todo, profundamente emocional. El libro en sí lo es. Aborda un tema delicado como el trastorno afectivo estacional, y lo hace desde una mirada poética, casi vegetal: es la voz de los árboles la que te acompaña a lo largo de la lectura.

En sus páginas se transitan la pena, el dolor, el duelo, la tristeza…, pero también la superación y la esperanza. Por eso me ha emocionado tanto recibir mensajes de personas que me dicen que se han sentido comprendidas, que se han visto reflejadas, y que han descubierto que incluso de lo más oscuro se puede salir adelante.

Creo que ese tipo de conexión íntima con el lector es el mayor regalo que puede recibir alguien que escribe.

P: – ¿Nos puedes anunciar algunas novedades que prepara la editorial?

R: – ¡Por supuesto!

Para después del verano, lanzaremos una nueva convocatoria para una segunda antología de relatos que reunirá historias con tintes fantásticos, mitológicos e inquietantes, todas bajo el hilo conductor de la luna y el lobo como símbolos.

En la actualidad, se está trabajando en una nueva edición ilustrada de Frankenstein de Mary Shelley. Aprovechando que en noviembre se va a estrenar la película bajo la dirección de Guillermo del Toro, queremos rendir homenaje al monstruo, desde una perspectiva visual y muy cuidada.

A finales de año, tenemos el lanzamiento de “Five Men Alone”, de Bárbara Arcos, un thriller policiaco contemporáneo que pretende enganchar al lector desde la primea línea hasta la última.

Y a medio plazo, seguramente para la primavera del 2026 podremos sacar dos ediciones ilustradas de dos importantes obras ya publicadas: “Figuras”, de Edgar Borges y “Lágrimas de pan” de Concepción Hernández.

Como puedes ver, la ilustración siempre está muy presente en nuestras publicaciones.

P: – ¿Qué podría esperar de Carola Mía un buen escritor (a) que no encuentra sello editorial?

Un buen trabajo, honestidad y cuidado. Aquí no se trata solo de publicar un libro, sino de construir algo que represente al autor y a su voz. 

Si su obra tiene un alma que vibra y me llega, haré todo lo posible por acompañarle en ese camino, con transparencia y respeto. Prometo que el escritor/a tendrá una experiencia editorial profundamente humana donde el nivel de implicación será muy importante. No soy un sello grande, Carola Mía acaba de nacer, pero el camino que quiere llevar es y será diferente al que llevan otras editoriales.