| El cambio climático por fin ha entrado en agenda. Es buena noticia, pero a diario nos vemos expuestos a niveles de sobreinformación que nos hacen sentir impotentes, avasallados, desorientados. Sabemos que necesitamos hacer algo, pero la dimensión del problema nos paraliza. Entonces, la pregunta que siempre emerge es ¿Y ahora yo qué hago?
La ecoansiedad se puede combatir.«No estamos preparados para asumir individualmente la carga de salvar el planeta», dice el autor. No se trata de quitarle peso y gravedad al cambio climático, sino de evitar la culpa climática y actuar sin demora.
El ambientólogo Andreu Escrivà nos ofrece en este breve ensayo herramientas para no caer en la angustia climática. La idea es escoger una parcelita de acción y librar tu particular batalla, no intentar hacerlo todo. Porque, por pequeño que sea, todo suma. Este manifiesto es una guía útil para activarte desde tu pequeña trinchera personal y animar a los demás a que también lo hagan.
Escrivà desmonta mitos, señala con lucidez la ristra de excusas que buscamos para la inacción y nos zarandea para que dejemos de mirar hacia otro lado. Y ahora yo qué hago propone, con ejemplos concretos, un listado de consejos sobre cómo alimentar la rebelión interior y la acción colectiva. Nos deja, en dos palabras, sin excusas.
“Son ideas sueltas, a modo de ingredientes con los que cocinar tu propia receta de activismo climático, acción individual y transformación colectiva. Que no te desanimen los errores ni los caminos sin salida; la clave es probar y aprender, compartir y repetir, construir y abastecer una despensa de herramientas climáticas amplia, versátil y que se adapte a nosotros” |
