«Recuerdo de un sueño» es una lectura desgarradora de una joven y brillante poetisa, capaz de empaparnos de su propia desesperanza e introducirnos en su escalofriante soledad.
“La angustia es mi consuelo”, “… música, y la sangre fluía por mi garganta…”
64 poemas bastan para contener las desgracias de una vida a través de trazos dolorosamente bellos. Su tema: La Muerte, compañera forzosa de sus días. Con tan solo 11 años pierde a su padre y dos años después comienza a dar salida a su dolor mediante palabras pesadas de desconsuelo. Se respira en su escritura la intensidad de su adolescencia, pero de una joven exquisitamente cultivada, mamada desde la cuna.
“Lo no iniciado y lo imposible” el no futuro y el casi no presente lo ensombrece todo.
Nos hace sentir como propio su dolor entre sepulcros, lápidas y moscas.
“Porque es difícil enterrar a aquel que ha igualado la muerte con la vida y habita en ambos.”
A la temprana edad de 18 años, cuando podría comenzar a metamorfosear su desgarro, su vida vuelve a ser brutalmente sesgada con el diagnóstico de una leucemia avanzada que finalmente la apagará.
Tras un año oculta reaparece más expuesta que nunca, mostrando sin veladuras, que la angustia sobre la que escribe es suya y es la propietaria única de tan desafortunada existencia, esa a la que da color en sus poemas.
“Desde hoy no soy,
nada tengo en común
conmigo misma.
No te conozco
y te detesto.”
Es en esta etapa final en la que escribe sus pocos poemas titulados y dedicados, entre ellos el que da nombre a este libro o su Enamoramiento Solitario. Aunque nada ha sido tan punzante como su Súplica Antes de Partir, “Por Dios: toma mis manos, aparta las tuyas del hielo… por Dios, ¡permíteme continuar!” o su Poema Sobre La Ceguera, donde describe su mundo sin color… y del huérfano y negro embrión que sin ser nacido, abandonado quedará.
“… cuando ya no puedo nada, ni siquiera llorar, pero aún soy capaz de sentir, …”
Reseñado por NdR