“Claro está que vivir no es más que el caos de la existencia, y más aún: es el afán loco y erróneo de ir desmantelando instante a instante la existencia hasta ver restaurado el caos inicial, y entonces, con la fuerza que da la incertidumbre y el miedo originado por el caos, volver a recrear instante a instante la existencia.
No hay cosa más peligrosa que ésa. La existencia, en sí misma, no comporta ningún miedo, ni ninguna incertidumbre, pero el vivir crea ambas cosas. Y, fundamentalmente, la sociedad carece de sentido, es un baño romano en el que todos se mezclan. “impacta por su delicadeza y al mismo tiempo crueldad”
Relato de una traición ignorada y de una idealización frustrada, ” El marino que perdió la gracia del mar ” (1963) es una inmejorable forma de introducirse en el singular universo creativo de Yukio Mishima (1925-1970). En esta breve novela, y a través de su protagonista, Noboru, el autor retrata el abismo insalvable que se abre como una herida entre el desesperado intento de un clan de adolescentes de hallar su ubicación en el mundo mediante un código de conducta fuera de uso, y una sociedad ya irremediablemente convulsionada y despojada de su armonía tras la traumática derrota en la Segunda Guerra Mundial.