No mentiras es un thriller adictivo que resulta imposible dejar de leer. Tuve que empezar a leerlo por “obligación” pero de una sentada me metí 200 páginas de golpe, no quería dejarlo. Y para leer el resto estaba deseando tener unos minutos para meterme con él de nuevo. Engancha de principio a fin.
Blas Ruiz viene de vender muchísimos libros en Amazon de sus obras anteriores y ahora publica con Ediciones B su primera obra en papel. Él no es un escritor al uso, no busquemos literatura refinada en sus líneas. Sin embargo tiene un ritmo brutal, una trama sorprendente y unas dosis de realidad en todo el trabajo policial que encandila.
Carlos es un abogado de éxito que debe acudir a un pueblo de Alicante cuando le comunican que su padre, con quien llevaba años sin hablar, se ha suicidado. Pero la tragedia se transforma en sospecha cuando encuentra un mensaje oculto en una torre de ajedrez. Una sencilla investigación de suicidio se convierte en una peligrosa cacería cuando un asesino en serie empieza a cometer atroces homicidios que parecen estar relacionados entre sí.
No entiendo cómo es posible que con una trama tan sencilla Blas Ruiz sea capaz de atrapar al lector de esta forma. Creo que la ambientación es buena. Mors, ese pueblecito tranquilo con todas las dependencias que cualquier lugar pequeño tiene. Pero el casting es lo mejor. La pareja de inspectores, Nicolas y Alfonso son geniales, unos Starsky y Hutch del siglo XXI en pleno Alacant. El contrapeso femenino de Alicia, la supuesta paleta de pueblo que sabe latín es muy bueno. Y el super abogado Carlos lleno de TOC redondea el círculo.
El repaso que hace el autor de los criminales en serie de la historia de España refresca la trama y la demanda social de respeto para las gentes de pueblo, que para los de la capital van en carro todavía, demuestra que Blas Ruiz es capaz de mezclar todo y hacerlo bien.
No mentirás es un thriller imparable que no soltarás hasta terminarlo.