Pensamos que un libro impreso es algo simple, pero no es así. Y no nos referimos al proceso de creación de contenidos del mismo, que tiene su aquel, sino al libro impreso como objeto físico. Un objeto físico compuesto por una estructura externa y una estructura interna. ¿Acaso tienes claro qué es la guarda? ¿Y la cubierta? No lo confundas con el forro o camisa… ¿Y sabes qué es el colofón?… ¿Y la separata?
Desde la revista Algarabía nos ayudan a distinguir todas las partes, o por lo menos las más significativas, de las que están compuestos los libros impresos con una excelente infografía sobre la anatomía del libro y la explicación de las funciones de cada una de ellas.
Estructura externa del libro impreso
Forro (camisa o sobrecubierta). El francés fourrer, “forrar”, a su vez de fourreau, “funda”. Cubierta generalmente de papel, que se pone a un libro o a un cuaderno.
Guarda. Del germánico warda, “acto de buscar con la vista”, y éste de wardôn, “atender, prestar atención”. Cada una de las dos hojas de papel que los encuadernadores colocan entre los forros y las primeras hojas.
Canto. Del latín cantus, “llanta de metal de una rueda”. Extremidad o lado de cualquier parte o sitio; corte del libro, opuesto al lomo.
Solapa. De origen incierto; solapar es “colocar una cosa sobre otra, cubriéndola solo parcialmente”. Prolongación lateral de la cubierta o camisa de un libro, que se dobla hacia adentro sin cubrirla del todo, y en la que se imprimen advertencias o anuncios.
Lomo. Del latín lumbus. Parte del libro opuesta al corte de las hojas, en la cual pone el rótulo.
Cubierta. Del latín coopertus, “cubrir”. Cada una de las partes, anterior y posterior, que cubren los pliegos de un libro, que suelen ser de un material más duro que el de los pliegos (cartón, plástico o piel). En la parte anterior se imprime el título de la obra, su autor, y se incluyen ilustraciones o diseños. En el argot técnico cada una de sus partes se conoce como 1ª o portada, 2ª, 3ª y 4ª de forros.
Estructura externa del libro impreso
Portada. Del latín porta, “puerta”. Primera plana de los libros impresos, en que figuran los elementos necesarios para identificar al libro: el título, el nombre del autor y el lugar y año de la impresión. De ésta derivan:
- Anteportada o portadilla: Generalmente es la primera página impresa de un libro.
- Contraportada (4ª de forros): Parte opuesta a la portada.
Epígrafe. Del griego ἐπιγραφή, epígrafe, “inscripción”. Cualquier frase, sentencia o cita que se coloca al principio de un escrito, sugiriendo algo de su contenido o que lo ha inspirado.
Prólogo. Del griego πρόλογος prólogos, compuesto por las raíces πρό-, pro-, “antes” y -λογος, -logos, “palabra, discurso”. En un libro de cualquier clase, escrito que antecede al cuerpo de la obra.
Índice. Del latín index, “indicador” o bien “señal, indicación”. En un libro u otra publicación, lista ordenada de los capítulos, artículos, materias, voces, etcétera, en los contenidos, con indicación del lugar donde aparecen.
Capítulo. Del latín capitŭlum, diminutivo de capuz, “cabeza”, en el sentido de “parte superior”, porque cada una de las divisiones de una obra literaria, un tratado, un presupuesto, una ley, etcétera, se encabeza con un número o título.
Epílogo. Del latín epilŏgus, y este del griego ἐπίλογος epílogos, que proviene a su vez de epilego, “añadir a lo dicho”. Resumen o conclusión de todo lo dicho en un discurso u otra composición literaria.
Colofón. Del latín colŏphon, y este del gr. κολοφών, kolophṓn, “término, fin, cumbre, remate”. Nota final que se pone en algunos libros; antiguamente se consignaba en ella algunos de los datos que hoy figuran en la portada; ahora suele expresar la fecha en que acabó de imprimirse y alguna característica de la impresión.
Otros términos a tener en cuenta
Imprimátur. Del latín imprimātur; de imprimĕre, “imprimir”. Licencia que otorgan las autoridades eclesiásticas para imprimir un escrito.
Separata. Del latín, separátum, “cuerpo separado”. Impresión por separado de un artículo o capítulo publicado en una revista o libro.