Fábulas - Jean de La Fontaine / Marc Chagall

Tenemos entre nuestras manos un delicioso libro que hará disfrutar tanto a los amantes de la literatura como a los amantes de la pintura y del arte. Cuarenta y tres espléndidas ilustraciones del pintor ruso Chagall iluminan y alegran con sus brillantes colores y la ingenuidad de sus figuras, sean animales o humanos, ― en realidad en su iconografía los animales suelen exhibir rasgos humanoides, ¡esos ojos!― y los humanos rebosan de la fantasía y calidez que los enlaza con aquello que en el hombre se acerca más a la naturaleza. Los azules brillantes, los verdes, el rosa calidísimo, las salpicaduras de amarillos y rojos, todo ello conforma un conjunto magnífico que, junto a las cuarenta y tres deliciosas fábulas de La Fontaine, un clásico donde los haya, francés universal, resulta el complemento ideal para el conjunto que se nos presenta, bellamente editado, bien traducido y con una calidad de imagen óptima. LEER MÁS

En el prólogo se nos explica la historia de esta conjunción feliz de literatura y arte plástico. Chagall realizó cien gouaches, por encargo del marchante Vollard, entre 1926 y 1927, pinturas que fueron expuestas en París, Bruselas y Berlín tres años después, y vendidas en su totalidad. Chagall realizó planchas para imprimir estampaciones con vistas a la publicación conjunta con las Fábulas, pero el proyecto siguió bloqueado por diversas circunstancias…., entre otras, la muerte de Vollard en el 39, y la guerra; en el 41 Chagall se refugió en Nueva York, y cuando volvió a París en el 48, el proyecto se había evaporado. Diversas exposiciones posteriores, en los años cuarenta y cincuenta, sacaron a la luz algunos de los gouaches realizados con motivo de las Fábulas. Didier Schulmann, en la introducción, nos habla de las críticas encontradas que Chagall recibió a causa de estos gouaches. Es curioso que el pintor recibió tanto alabanzas como feroces ataques, pero no tanto por las pinturas en sí, sino por razones más bien ideológicas. Había quienes no soportaban que al gran literato francés por excelencia lo interpretara visualmente un extranjero, un ruso y para más inri, judío.

Lo que pretendía Vollard era que Chagall aportase una impresión paralela de las Fábulas, no que las “representase” propiamente. Muchos artistas lo habían intentado antes, sin demasiado éxito, ¡incluido Gustave Doré! Entre las opiniones entusiastas –puesto que descartaremos las ideológicas- se encuentra el crítico Jacques Guenne, que escribió en la revista L’Art Vivant, en 1927 : «Chagall no ha ilustrado exactamente las Fábulas, sino que a partir de ellas, con el humor más delicado, ha creado una serie de imágenes que, reunidas hoy, constituyen un mundo agitado por todos los vicios, por todos los deseos, por todas las flaquezas, por todos los caprichos denunciados por el fabulista, pero un mundo imaginado por un pintor a quien sólo el color, por sí solo, sirve de moralidad» En 1930, otro crítico, Marcel Schmitz, en XXéme Siècle, comenta: «Y así como el arte, delicioso y evasivo, del gran fabulista sólo nos deja entrever las líneas generales del decorado, pero nada más, el de Chagall se conforma con crear la atmósfera ¡La atmósfera de una Fábula!(…) Es el auténtico clima de la fábula, a caballo entre la realidad y el sueño». Creo que ambas citas definen perfectamente lo que el lector va a encontrar al ir pasando las páginas de este libro.
Jean de la Fontaine (Château-Thierry, 1621-París, 1695) Escritor que marca un hito en la literatura francesa y universal. Estudió Derecho en la Universidad de Reims, ejerciendo su profesión al tiempo que componía su obra poética. Produjo las fábulas más famosas de los tiempos modernos. Frecuentaba los salones de la corte del Rey Sol y perteneció al grupo literario-filosófico de Molière, Racine y Boileau, el llamado Cuarteto de la Rue du Vieux Colombier. Publicó varios volúmenes de Cuentos y relatos en verso (1667-1674) y tres colecciones de sus Fábulas (1668-1694), que lo convirtieron en uno de los hombres de letras franceses más eminentes de la época. En 1683 fue elegido miembro de la Academia Francesa. Sus fábulas resaltan por su agilidad e ingenio narrativo, así como por el amplio y sutil conocimiento que el autor tenía de la vida. Asimismo escribió poemas, libretos de ópera y obras de teatro como el relato romántico en verso y prosa Los amores de Psique y Cupido (1669).

Marc Chagall (Vitebsk, 1887-St. Paul de Vence, 1985) Pintor y diseñador de origen ruso-judío, uno de los pintores y artistas gráficos más relevantes del siglo XX. Estudió arte en San Petersburgo y en París (1910-1914). Entre 1915 y 1917 vivió en San Petersburgo; después de la Revolución Rusa, fue director de la Academia de Arte de Vitebsk de 1918 a 1919 y director del Teatro Judío Estatal de Moscú de 1919 a 1922. En 1923 se trasladó a Francia, dónde pasó el resto de su vida, exceptuando un periodo, de 1941 a 1948, en el que vivió en Estados Unidos. Su obra está impregnada de humor, poesía y fantasía. Pintó varios murales y llevó a cabo los decorados de numerosas producciones teatrales. Asimismo, ilustró obras literarias como Las almas muertas de Gogol y Las fábulas de La Fontaine, cuyo trabajo ocupa el libro del que hablamos.

Ariodante

FICHA DEL LIBRO

Fábulas – Jean de La Fontaine / Marc Chagall

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