Reseña de Progenie de Susana Martín Gijón

Camino Vargas, jefa del grupo de homicidios de Sevilla, recibe el caso de una mujer atropellada de forma claramente voluntaria, con un chupete introducido en la boca como firma del crimen. A partir de ahí se sucederán otros homicidios conectados incomprensiblemente por el hecho de las mujeres asesinadas estaban embarazadas. 

Las dificultades para ser madres parecen ser el trasfondo de los homicidios sin embargo todo será bastante más complicado. A Susana Martín, la escritura de novela negra le divierte, le parece un reto intelectual, un juego con el lector, en el que participar de forma justa, aportándole un final redondo.

Progenie es una novela adictiva con capítulos cortos, finales intrigantes en cada uno de ellos que impiden que el lector deje de leer en ningún momento.

La trama de Progrenie se adentra en la reproducción femenina, en el negocio ilegal y legal para posponer el momento biológico de la maternidad, con técnicas de color de rosa, que se venden como algo muy fácil pero que transmiten mucho sufrimiento detrás. Esa es la denuncia social de esta obra en palabras de la autora:

“Encuadro mis novelas en un tema social que me preocupa. Este es un tema del que no se habla demasiado. Incluso la presión hacia las mujeres para que sean madres sobre todo a cierta edad. “

El elenco está compuesto por Camino Vargas, jefa temporal del grupo de homicidios, un personaje buscado por la escritora sevillana ya que “Quería crear un personaje como Camino, ella que no quiere ser madre y se enfrentará al anhelo de ser madre que tienen las víctimas.” La acompañan en la investigación Pascual, de tradición castrense, a quien le cuesta obedecer a su jefa. Lupe, a quien no se la reconoce ni en casa ni en trabajo, el chulo de Fito y la experiencia de Teresa quien está a punto de jubilarse.

Un thriller con formato clásico, sin saltos temporales, con la única libertad de las voces en cursiva de los capítulos introductorios, del que Susana Martín Gijón nos dice:

“Disfruto mucho escribiendo las novelas, creo que se nota aunque sean temas duras pero le intento meter un poco de frescura y humor.”

Nadie que escribe estas cosas puede ser dulce” comenta un personaje de novela, sin embargo hablar y leer a Susana es un verdadero placer.