Honesta e irónica, delicada y brutal

La mujer antes de la píldora, África tras la independencia, la suerte de una madre, el periplo de una mujer en busca de su destino.

Desgarradora, conmovedora, por fin llega la continuación de la apasionante CORAZÓN QUE RÍE, CORAZÓN QUE LLORA: Maryse Condé vuelve a ensanchar los límites de la autobiografía en LA VIDA SIN MAQUILLAJE.

De Francia a Costa de Marfil, Guinea, Ghana y Senegal, el poliédrico escenario de la transformación vital de la ganadora del Premio Nobel Alternativo que se concedió en 2018.

Honesta e irónica, delicada y brutal, Maryse Condé vuelve a ensanchar los límites de la autobiografía para construir un bello relato universal: el de una mujer desposeída que, sin dejarse arrastras por los embates del destino, busca incansablemente la plenitud y la felicidad.

Después de rememorar su infancia en Corazón que ríe, corazón que llora, Maryse Condé retoma el relato de su vida y nos invita a acompañarla en la apasionante travesía que marcó su juventud: un periplo que comienza en París, con un embarazo accidental y el abandono del hombre al que ama, y que la lleva a vagar por distintos países de África en busca de esa identidad que ya empezaba a entrever con el descubrimiento de la negritud. Costa de Marfil, Guinea, Ghana y Senegal conforman el poliédrico escenario de la transformación vital de Maryse, que se pasea por los círculos revolucionarios del socialismo africano y se entrega a la fiebre de la creatividad literaria al tiempo que se enfrenta a diversos desengaños amorosos, a los obstáculos de la maternidad no deseada y a los estragos emocionales de la orfandad. Narrar su historia tal y como es, sin maquillaje ni paliativos: ese es el eje que vertebra la obra, revelándonos un espíritu que, a pesar de sus terribles sufrimientos, conservó intacta su pasión por la vida.