Los peces solo flotan muertos, novedad para enero 2020

Barcelona, 1972. Un misterioso asesinato en el Club Náutico que pondrá en jaque a la policía, a las más altas esferas de la burguesía de la ciudad y a los Servicios Secretos de la Casa del Príncipe Juan Carlos de Borbón.

Los peces solo flotan muertos

Una mañana de 1972 aparece un cadáver flotando en aguas del Club Náutico de Barcelona. El muerto es Alberto García Rañé, joven hijo de la alta burguesía barcelonesa, tripulante del Blue Spice, uno de los veleros que debe participar en la selección para la Olimpiada de Munich.
La autopsia demuestra que la causa de la muerte ha sido un fuerte golpe en la cabeza y todas las miradas apuntan al velero Blue Spice, donde se dice que iba embarcado el difunto, pero no todo es lo que parece.

El encargado de la investigación es un inspector de policía, Cristóbal Molina, recién llegado a Barcelona y que proviene de la Marina, donde ha servido en los servicios de inteligencia hasta que la malaria contraída en Guinea le ha hecho abandonar la carrera militar.
La investigación del crimen de Barcelona la hará por cuenta de la juez Marta Esteller, una de las primeras juezas en España, casada, con una niña y una brillante carrera judicial pues es protegida del presidente de la Audiencia Territorial de Barcelona.

La investigación se ve entorpecida por el hecho de que uno de los veleros que deben participar en las pruebas está patroneado por el Príncipe Juan Carlos y se quiere evitar cualquier noticia que lo pueda relacionar. Los implicados mienten para desviar la investigación a un asunto de drogas, pero la juez y el inspector no ceden a las presiones.