Digamos, con todo, que una cosa es la consideración de la guerra como mal implícito para el hombre, y otra bien distinta su realidad histórica dentro del devenir social. LEER MÁS
La realidad histórica de la guerra (más específicamente, “De las guerras persas a la caída de Roma”) es lo que trata de recoger aquí el profesor Hanson en su condición de autor-editor. Aparecen acogidos así en sus páginas estudios relativos a la figura de Alejando Magno y Tucídedes, Julio Cesar y Epaminondas, pero también apartados tan singulares y esclarecedores como ‘La guerra urbana en el mundo griego clásico’ o ‘Guerras de esclavos en Grecia y Roma’.
Dentro del texto, los distintos apartados no son sino reseñas que confirman el mosaico guerrero del período citado. La escritura es clara, el lenguaje preciso. Se hace fácil a la lectura, lejos de pesadas reconsideraciones academicistas, y no deja de sorprender el comentario clarividente a propósito de alguna circunstancia histórica muy elocuente. Así cuando leemos, en la p. 224: “Cruzar el Rubicón era señal del fracaso político de Cesar. Era una apuesta arriesgada, de ahí su famoso comentario, ‘la suerte está echada’ Habría sido mejor regresar pacíficamente, avanzando sin problemas hacia un segundo consulado y después hacia un nuevo mando provincial, que le hubiera protegido contra un procesamiento”.
Claro que eso tienen las guerras: su implícito riesgo; su implícito error. De algún modo lo expresó Tua Forsström cuando escribió: “El que vuelve es siempre otro”.
Ricardo Martínez https://www.ricardomartinez-conde.es/