La reina en el palacio de las corrientes de aire – Stieg Larsson

Dentro de la escala de la mejor literatura mundial una novela negra/policíaca díficilmente estará en los primeros lugares. Eso no quiere decir que dentro de su propio género no sea perfecta y que trasladada a la escala general suba bastantes enteros. Eso sucedió el año pasado con Los hombres que no amaban a las mujeres, un libro que dentro de su tipología criminal y de investigación obtuvo un rotundo sobresaliente y que en casi todas las encuestas acabó entre los diez mejores títulos globales del año.

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A esos tipos de valoraciones nosotros añadimos el grado de placer obtenido de su lectura, el cual creemos que alcanzó un nivel de notable tanto para el lector exigente como para el ocasional. No es cierto que todos los bestsellers sean flojos, como no es cierto lo contrario, que los libros pocos vendidos sean buenísimos. Alcanzar ese equilibrio es tan complicado que si alguno lo logra merece por lo menos el reconocimiento general, aunque no tanto la comprensión por la fenomenología fanática que le rodea.

Dicho este tostón –si van a aguantar ochocientas cincuenta páginas bien pueden aguantarnos a nosotros este editorial- vayamos a lo importante:

La reina en el palacio de las corrientes de aire es la segunda parte de la segunda parte. Es decir, poca conexión argumental con Los hombres que no amaban a las mujeres y acoplamiento perfecto con La chica que soñaba con el bidón…
En cuanto a nivel creemos que está en un escalón superior a La chica… e inferior a Los hombres... Si en su escala particular de cinco, Los hombres tendrían cinco estrellas, nosotros asignaríamos sólo tres a La chica. La razón es que Larsson se ve obligado a recurrir al efectismo –el silencio de Lisbeth– y a dosis explicitas de sexo y violencia para mantener el interés. Ese cambio de investigación y psicología de la primera parte, muy del aire de El silencio de los Corderos, desaparece en la segunda, convirtiéndose en novela negra pura y dura –para nosotros tres estrellas- y resurge con fuerza en La reina a la que otorgamos un punto medio –cuatro estrellas– debido a que el terror mental afecta a la mayoría de los personajes, desde Lisbeth, pasando por Erika –quien tiene un especial protagonismo, y alcanzando al mismo Blonqvist, a quien le …

Sobre la trama poco diremos –basta con leer abajo la nota de la editorial, pero sobre la lectura sí. Las primeras cien páginas pasan voladas, las segundas cien páginas desesperan un poco. Larsson y su editor se empeñan en contarnos historias administrativas que sólo confunden y despistan. Pero a partir de la página doscientos vamos cuesta abajo en una montaña rusa loca hasta el mismísimo final, juicio incluido, comentarios sobre Gibraltar y sí, algo de sexo y violencia al final, pero sólo al final, justo antes de que a Lisbeth la … Mantener el ritmo trepidante del final de la primera y de la segunda durante casi todo el libro tiene su mérito. Podemos decirles que anoche a la una de la madrugada, en la página seiscientos cincuenta leído todo de un tirón, el que uno se pregunte si seguir o no por el deseo de conocer el final dice mucho de un libro.

En su contra diremos que incluye decenas de páginas sobre organismos policiales secretos y sobre alarmas, más propias de un discurso del Senado que de este libro, lo que le hace perder ritmo en algunos momentos. Y que la acumulación de personajes nuevos, sumados a los antiguos marea un poquito.

Conclusión:

A quien no leyó el primero: que lea todos
A quien le gusto el primero le gustará el tercero si ha leído el segundo, claro.
A quien le gustó el segundo le encantará el tercero
A quien no le guste Millenium tiene en estas páginas otras muchas opciones placenteras donde disfrutar del placer de la lectura.

Pepe Rodríguez

RESEÑA OFICIAL DE LA EDITORIAL

Como ya imaginábamos, Lisbeth no está muerta, aunque no hay muchas razones para cantar victoria: con una bala en el cerebro, necesita un milagro, o el más habilidoso cirujano, para salvar la vida. Le esperan semanas de confinamiento en el mismo centro donde un paciente muy peligroso sigue acechándola: Alexander Zalachenko, Zala. Desde la cama del hospital, y pese a su gravísimo estado, Lisbeth hace esfuerzos sobrehumanos para mantenerse alerta, porque sabe que sus impresionantes habilidades informáticas van a ser, una vez más, su mejor defensa.
Entre tanto, con una Erika Berger totalmente inmersa en las luchas de poder y las estrategias comerciales del poderoso periódico Svenska MorgonPosten, en horas bajas tras el descenso de las ventas y de los anunciantes, Mikael se siente muy solo. Quizás Lisbeth le haya apartado de su vida, pero a medida que sus investigaciones avanzan y las oscuras razones que están tras el complot contra Salander van tomando forma, Mikael sabe que no puede dejar en manos de la Justicia y del Estado la vida y la libertad de Lisbeth. Pesan sobre ella durísimas acusaciones que hacen que la policía mantenga la orden de aislamiento, así que Kalle Blomkvist tendrá que ingeniárselas para llegar hasta ella, ayudarla, incluso a su pesar, y hacerle saber que sigue allí, a su lado, para siempre.

Ficha del libro

Título: La reina en el palacio de las corrientes de aire |Autor: Stieg Larsson| Editorial: Destino | Páginas: 864| Precio : 22,50€

2 comentarios en «La reina en el palacio de las corrientes de aire – Stieg Larsson»

  1. “Larsson y su editor se empeñan en contarnos historias administrativas que sólo confunden y despistan.”
    Bieeeeeeeeeeen, creía que era yo la única en el universo que se atragantaba en esta parte por pura insuficiencia craneal.

  2. Yo leí Los hombres… de un tirón. Bueno, al principio me costó un poco meterme… pero después me enganché. No podía dejar de leer.

    El caso es que cogí La chica… con mucho interés… pero no me convence. Llevo ya doscientas y pico páginas y creo que hay muchas cosas que sobran… demasiadas referencias al primer libro. En mi opinión si hubiera ido más directo al grano, el libro sería mucho mejor.

    No sé si me atraveré con el tercero después de lo leído.

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